La propuesta:
La comunidad de vecinos del edificio de Pg. de Sant Gervasi necesitaba readaptar la portería para que esta fuera más accesible y un cambio de estética general para lograr más luminosidad. En el proyecto trabajamos el espacio para ofrecer una triple mejora: en la estética, en la calidad y en la accesibilidad.
Como los tiempos eran muy ajustados para no perjudicar la productividad del obrador, se creó una zona de seguridad con divisiones de pladur para que la runa y el polvo de la obra no perjudicaran al obrador de pasteles.
Además, se habilitó una entrada auxiliar por dentro de la misma pastelería para los vecinos, ya que la puerta de la portería quedó inaccesible. Durante el mes de agosto se consiguió llevar a cabo toda la obra, que suponía demoler parte del forjado del obrador, realizar una zapata, un pilar y un nuevo forjado.
Además, se cambiaron todos los desagües y colectores del edificio que cruzaban por el obrador haciéndolos pasar por la parte del patio, de manera más funcional y menos molesta para el local.
Uno de los detalles más bonitos, es que la mesa de la portería “flota” gracias a la sub estructura de acero que se ancla en la pared lateral. Esta sub estructura está recubierta de travertino y los espejos de la pared izquierda, además de generar amplitud y dar mucha luminosidad, realizan un efecto que parece que la mesa esté suspendida en el aire.