¿Qué es el proyecto de obra?
El proyecto de obra es uno de los aspectos más importantes cuando se lleva a cabo cualquier reforma integral. No importa si se plantea con relación a una edificación comercial o residencial. Por este motivo, es necesario que lo conozcas y sepas qué es, cuál es su utilidad y mucho más.
¿En qué consiste el proyecto de obra?
El proyecto de obra es un conjunto de documentos donde se recogen los detalles de los cambios a realizar. En este se definen los aspectos técnicos de la edificación antes de ser construida o reformada.
Resulta de gran utilidad para evitar contratiempos y poder analizar potenciales problemas antes de que ocurran. Además, sirve como orientación de los pasos futuros para que el proyecto tenga éxito.
Estos documentos son necesarios y obligatorios para recibir las licencias municipales y el visado urbanístico, según lo detallado por el Real Decreto 2512/1977. También sirve para analizar el cumplimiento de las distintas normativas urbanas y la correcta aplicación del Código Técnico de Edificación (CTE).
¿Qué debe tener un proyecto de obra?
Estos documentos deben elaborarse de acuerdo con dos fases y las cuales tienen distintas secciones que las componen. Veamos:
Proyecto básico
Es idóneo para recibir la aprobación de las licencias municipales. No obstante, es insuficiente para comenzar con la construcción. Además, consta de las siguientes partes:
- – Son áreas que definen la exposición del proyecto (autor, datos generales, necesidades y solución), justificación para su realización y la descripción técnica (volumen, superficie, materiales, etc.).
- – Planos generales. Son diagramas donde se desglosan las plantas, áreas específicas, alzados, entre otros.
- – Son los detalles sobre el costo de los materiales, mano de obra y todo lo necesario para llevar a cabo el proyecto.
Aquí es fundamental considerar las normas de descripción de proyectos que aplican a los elementos de construcción. En el caso del presupuesto, nos referimos a la normativa UNIFORMAT-II ASTM. Según esta, cada componente se agrupa para una mejor comprensión por parte de los especialistas que van a liderar la obra.
Esta fase es importante porque determina la factibilidad de llevar a cabo el proyecto al plantear la finalidad de este, así como la problemática, solución y el costo general.
Proyecto de ejecución
Consiste en la segunda etapa del proyecto de obra y plantea el desarrollo de la fase anteriormente descrita. Gracias a este puedes recibir las licencias urbanísticas para iniciar la construcción o reforma.
Al igual que ocurre con el proyecto básico, este consta de algunas partes de interés, como, por ejemplo:
- – Planos de cimentación y estructura. Proporciona datos importantes sobre el diseño de la edificación. Aquí se detallan secciones analíticas con los cálculos pertinentes.
- – Esquemas y dimensionamiento de instalaciones. Consta de planos con las medidas precisas del área de trabajo.
- – Pliego de condiciones. Consta de los detalles bajos los cuales se construyen o reforman las instalaciones.
Como puedes ver, aquí se exponen los datos finales para la ejecución del proyecto. Esto incluye el plazo general de ejecución, las limitaciones financieras y el programa de tareas. De esta manera, y junto al proyecto básico, queda definido todo lo necesario para llevarlo a cabo.
¿Cómo se hace un proyecto de obra?
Para hacer un proyecto de obra es necesario considerar las dos fases ya explicadas. Además, se debe tramitar con ayuda de un arquitecto o ingeniero, según el tipo de construcción.
En condiciones normales, el profesional te debe solicitar datos concretos, como la situación del solar, dimensiones en metros cuadrados, presupuesto destinado al proyecto, necesidades generales, entre otros. Todo esto se vacía en un borrador donde se van a plantear la puntualización de las necesidades y exigencias técnicas generales.
A partir de lo anterior, el profesional procede a efectuar la presentación de la obra, plantear los parámetros de ejecución y criterios en general para conformar el proyecto.
¿Qué es un proyecto? Ejemplo
En términos simples, un proyecto es un conjunto de ideas organizadas que se entrelazan para cumplir con un objetivo final, el cual puede ayudar a resolver un problema.
También se considera como un plan de trabajo, ya que debe tener una presentación inicial con metas propuestas y una sección de ejecución. Por ejemplo, si piensas en crear una vivienda, primero se plasman las ideas generales, como el lugar, cantidad de habitaciones y baños, tamaño de la cocina, número de plantas, entre otros. Después, se procede con la evaluación y creación de un proyecto de obra.
Cualquier formulación de proyectos siempre se debe hacer por profesionales. Si te interesa reformar o construir una vivienda, no hay nada mejor que contratar los servicios de expertos como nosotros.
Contamos con experiencia en arquitectura, construcción e interiorismo. Te guiamos y nos preocupamos por cada área de tu reforma. Siempre nos ocupamos de los detalles, por muy pequeños que sean.